Antes de nada voy a hacer una mencion especial a dos personas: Lydia y Alina, no voy a decir exactamente por que ya que no se si se me esta permitido y supongo que querran ser ellas las que den la noticia. Pero queria darles la gracias por ese proyectito que habeis puesto en marcha y que significa mucho para mi.
Siguiente asunto, como veis en el titulo os traigo una nueva historia, esta historia ya esta acabada, la escribi el año pasado con junto la que era mi mejor amiga. Es una historia bastante especial y espero que la disfrutéis.
Los personajes de esta historia los encontrareis en la pagina de personajes y tengo algunos videos que tambien subire.
La historia trata de dos gemelas, cada una de nosotras escribia desde el punto de vista de una de ellas asi que cada vez que veais esto ************* significa que narra la otra gemela.
(Mi gemela como os imaginareis es Lauren)
¡Buen Karma!
CapÃtulo 1-Las gemelas Lightwind
Me revolvà un par de veces entre las suaves sábanas de mi cama mientras el despertador sonaba por enésima vez. Decidà abrir los ojos por fin para apagarlo de forma definitiva, miré al techo mientras intentaba que mis ojos se acostumbraran a luz de la mañana que entraba por la ventana y refunfuñaba por lo bajo. Me estiré todo lo que pude con el fin de desperezarme y me levanté de forma pesada. Aún un poco adormilada pero en pie me dirigà hacia el baño situado dentro de mi propia habitación para lavarme la cara. Despierta ya encendà el equipo de música para poner la radio y a continuación me dirigà al armario mientras bailaba al son de Robbie Williams. Una vez vestida bajé por las largas escaleras de mármol de forma animosa hacia la cocina. Nuestra casa era bastante grande, tenÃa dos pisos y uno subterráneo con la zona de juegos, librerÃa etc. Penetré en la espaciosa cocina para situarme en frente de la nevera.
-¡Buenos dÃas Mary!- le dije a la ya vieja señora que atendÃa nuestra casa desde que mi memoria alcanzaba a recordar.
-Buenos dÃas señorita Lauren, la veo muy contenta esta mañana.-dijo con una amable y cariñosa sonrisa. Mary era una mujer con arrugas bien formadas y un cabello fino y canoso, de aspecto robusto, siempre habÃa cuidado de mà y de mi hermana, nos tenÃa mucho cariño, y nosotras a ella.
-SÃ, la verdad es que presiento que hoy será un gran dÃa.-Dije con una sonrisa amplia,-¿Dónde está mi hermana?-pregunté mientras introducÃa mi brazo dentro de la nevera para extraer una manzana verde a la vez que miraba a mi alrededor en busca de mi gemela.
-La señorita Marsha se ha ido hoy temprano.- Asentà mientras le daba un primer mordisco a la manzana y me apoyaba sobre el borde de la encimera. Masticaba enérgicamente cuando me percaté de la pequeña bolsa de color marrón situada a unos cuantos centÃmetros de mÃ, no me lo podÃa creer, otra vez, bufé. Estiré el brazo y agarré la bolsa.
-¿Cuándo se comprará esta niña unas gafas?- dije mientras mantenÃa en alto la pequeña bolsa que ponÃa Marsha en la parte delantera.- ¡Ha vuelto a llevarse mi comida!¡Y ya ha conseguido fastidiarme la mañana!-exclamé mientras me giraba haciendo un gesto de exasperación, a mi espalda podÃa oÃr como Mary reÃa divertida.
Después de recoger mis cosas salÃa fuera de la casa hacia la gran verja principal, justo unos pocos metros antes de ella estaba mi coche. Un Mustang descapotable azul aturquesado, era antiguo, pero yo lo tenÃa muy bien cuidado y se notaba, adoraba ese coche, el Ferrari de mi hermana no estaba juntó a él, no entendÃa como no le parecÃa ostentoso aparecer con él en el instituto. Metà la mochila en la parte de atrás y puse el coche en marcha, miré el reloj, mierda tenÃa que darme prisa si no querÃa llegar tarde.
Por fin llegué a la calle del instituto y todo era un caos, se oÃan bocinazos y los grupos de gente me parecÃan más numerosos estas semanas. HacÃa varios dÃas que la gente se habÃa empezado a volver loca por que el baile de fin de curso estaba a la vuelta de la esquina, los del último curso lo estábamos organizando a lo grande ya que ese iba a ser nuestro último baile antes de ir a la universidad.
Mientras aparcaba en el sitio de costumbre, que gracias a Dios nadie me habÃa quitado, miraba a mà alrededor con nerviosismo. Entonces oà una bocina de un coche y miré instintivamente hacia el lugar de donde provenÃa el sonido. Entre la espesa multitud pude distinguir una figura alta de hombros anchos, tÃpica de un quarterback, sus cabellos eran cortos y rubios y ojos marrones, puede que fuera el chico más guapo del instituto, para mà lo era, era Diuke, mi novio.
Salà del coche en su dirección con una sonrisa en el rostro, mientras me acercaba a su posición distintos saludos de gente diferente me llegaban y yo contestaba con el tono más amable que podÃa, pero no me detuve a hablar con nadie, por fin llegué hasta Diuke, estaba apoyado contra su Jeep Grand Cherokee negro con una amplia sonrisa en la cara.
-Buenos dÃas princesa.-Dijo mientras me daba un largo beso en los labios, no pude evitar sonreÃr, verle siempre me alegraba el dÃa. Los padres de Diuke y los mÃos eran grandes amigos, desde hacÃa mucho, por eso mi madre nunca habÃa puesto objeción a que yo saliera con el hijo de los Harrison, era lo que ella llamaba “un buen partido”, ahora lo que más le interesaba era encontrar uno para mi hermana.
-Buenos dÃas.-le contesté, entonces él ladeó la cabeza examinando la bolsa que llevaba en la mano.- ¿Y eso?-preguntó frunciendo el ceño, yo miré la bolsa y resoplé con gesto molesto.-Déjame adivinar,-vaciló- es la comida de tu hermana.
-Qué iba a ser si no.-Dije, él sonrió orgulloso de sà mismo, se colocó a mi lado y me cogió de la mano. Su contacto era cálido, al igual que su sonrisa.
-Venga, vamos a clase.-dijo tirando levemente de mi mano, yo le retuve.
-No, tengo que ir a buscar a Marsha para darle su comida y que me de la mÃa.
-Vale, entonces te acompaño.-Sonreà y me puse de puntillas para volver a besarle, sabÃa que todo el mundo nos miraba, y no podÃa evitarlo, me gustaba. De algún modo me agradaba que las chicas del instituto me envidiaran por salir con el capitán del equipo, era como una pelÃcula, la animadora y el jugador.
Diuke y yo recorrimos los largos pasillos del instituto hacia el aula de matemáticas, la primera clase que tenÃa mi hermana ese dÃa. Después de buscarla por todos los pasillos la encontramos con algunas amigas de nuestro grupo.
-Hola Mariah, hola Clary.-Las saludé sonriendo, ellas me devolvieron la sonrisa, yo me llevaba bien con todos los miembros de nuestra pandilla. A continuación me giré hacia mi hermana, ella era… prácticamente igual que yo, salvo por sus ojos color ámbar y ese tinte rojo chillón que llevaba para que nos diferenciaran. Mi gemela era la tÃpica adolescente, le encantaba ir de fiesta, salir con chicos y ser irresponsable, tenÃa un carácter que yo denominaba como odioso y algo molesto, aunque debo decir en su defensa que sabÃa escuchar, pero no era esa la razón por la que la mayorÃa de los chicos ansiaban en salir con ella.-Tú,-le dije lanzándole una mirada asesina mientras levantaba la bolsa marrón- a ver si aprendes a leer de una vez, ¿o voy a tener que poner un cartel de neón?- me hizo una mueca y dejó entrever la lengua, a los allà presentes la escena les parecÃa divertida, aunque a nosotras no tanto.
Marsha metió la mano en el bolsillo exterior de su mochila Eastpack y extrajo otra bolsa marrón exactamente igual a la que yo sostenÃa, pero en esta ponÃa Lauren en la parte delantera. Casi se la arranqué de la mano al mismo tiempo que le lanzaba su comida. Y cuando mi almuerzo estaba a salvo en mi mochila volvà a agarrar a Diuke para dirigirnos a nuestra primera clase.
Entramos en el aula de biologÃa y nos sentamos uno al lado del otro. La verdad es que me costaba concentrarme en la clase por el hecho de tener a Diuke al lado y tener que pensar todos los preparativos para el baile. TendrÃa que hacer las paces con Marsha si no querÃa que la organización fuera un completo desastre. Marsha y yo éramos las presidentas del comité, otro detalle de pelÃcula, pero asà era, tenÃamos que encargarnos prácticamente de todo, aunque mayoritariamente las ideas provenÃan de mà Marsha se solÃa encargar de llevarlas a cabo, éramos un equipo. Mientras yo pensaba Diuke jugueteaba con los pequeños dedos de mi mano. Sin que me diera cuenta las dos primeras horas se pasaron volando, mientras que las otras siguientes pasaron de forma lenta y tortuosa, intentando acabar con todas y cada una de mis jóvenes neuronas.
Por fin llegó la hora de la comida, después de comprar algo de beber me dirigà a la mesa de siempre donde Diuke ya me esperaba en nuestro sitio particular que siempre reservaban para nosotros en una esquina de la mesa. En cuanto me acerqué me dejó sitio y me rodeó con un brazo mientras yo comÃa mi bocadillo vegetal. Cuando acabé me recosté sobre su torso y él me envolvió con sus brazos de lanzador, alcé el rostro para besarle de forma apasionada y paulatina. Cuando me separé de él eché un vistazo al otro lado de la mesa y pude ver a mi gemela sentada al lado de Adam mirándome con el rostro tenso alzando de forma excesiva las cejas, ¿pero que le pasaba a esa niña hoy? En fin, ya hablarÃa con ella en casa, no era cuestión de armar un pollo allà en medio, aunque, al fin y al cabo, eso a ella le encantaba.
En poco tiempo sonó el timbre y resoplé, de vuelta a la tortura, me dirigà a clase con Mathew ya que Diuke y yo solo coincidÃamos en tres asignaturas. Cuando me senté y la clase comenzó me dediqué a pensar, definitivamente Marsha necesitaba un novio, no entendÃa por qué no salÃa con Adam, estaba claro que a él le gustaba ella, aunque tampoco me extrañaba con la cantidad de esperanzas que ella le daba, y habÃa que reconocer que el chico no estaba nada mal. Además cualquier pardillo darÃa lo que fuera por salir con una de las chicas más populares del Dalton High School. Continué pensando mientras garabateaba cosas sin sentido en el libro de fÃsica y sin que me diera cuenta la clase habÃa terminado, recogà mis cosas rápidamente y salà al pasillo. Diuke me estaba esperando apoyado contra la pared, como siempre, no entendÃa como a la gente podÃa aburrirle la rutina, a mi me encantaba. Se acercó y me dio un beso fugaz en los labios mientras acto seguido decÃa:
-¿Oye que te parece si vamos a dar una vuelta? Te puedo acercar a casa para que dejes las cosas.
-¡Claro! Aunque tendré que venir a por mi coche después si no quiero venir con mi hermana al insti mañana.
-O bien puedo traerte yo.-Dijo con una sonrisa traviesa en el rostro, me puse de puntillas para besarle de nuevo, rodeando su cuello con mis brazos, ya estábamos en el parking.
-Me parece un buen plan.-Sonreà divertida.
************************
Abrà la puerta de mi 612 scaglietti y me deslicé en su interior. Me fastidiaba que mi ostentoso deportivo de color azul no fuese descapotable. Pero lo que más me fastidiaba era observar como Lauren se besaba con esa masa de músculos. HabÃa quedado con Adam para ir a dar una vuelta en su limusina y creo que iba a tener que cancelarlo. Bueno, creo no, estaba decidida. Los chismes que circulaban sobre Lauren y Diuke por el instituto no eran buenos para su reputación. Y si la reputación de mi gemela caÃa, la mÃa también, cosa que no estaba dispuesta a permitir que sucediera. Perder la reputación entre la élite de Nueva York significaba morir. Introduje las llaves en el contacto y escuché con una sonrisa maliciosa el ronronear de mi deportivo. No me gustó que alguien picara los nudillos contra mi ventanilla por dos cosas, la primera me la ensuciaba y la segunda me iba a hacer perder de vista el coche de Diuke. Donde por cierto, iba Lauren. Y es que mi gemela no se podÃa dar por aludida después de la cantidad de miraditas de advertencia que le habÃa echado durante el almuerzo. Solo por intentar advertirla de los cotilleos que estaban en boca de todos, habÃa tenido que tragarme toda una sesión de besos en los que el musculitos se encargaba de meterle la lengua hasta la campanilla a mi gemela. Algo repugnante dado el gran parecido entre nosotras dos. Me quité las gafas de sol y bajé la ventanilla mientras observaba a Adam recostarse en el capó del coche. La verdad es que el chico era mono pero no encajaba con mi perfil. Le miré y sonreà amablemente.
-¿CreÃa que habÃamos quedado?- objetó alzando una ceja.
Fruncà los labios.
-Lo siento Adam pero tengo que encargarme de un problemilla- contesté mientras deslizaba la vista hacia el Jeep del novio de mi gemela.
-¿Diuke?- preguntó algo tÃmido.
-Quién sino. A veces incluso me sorprendes- sonreà pero enseguida me serené. Mi objetivo salÃa del parking y no querÃa que Lauren desapareciera de casa antes de que yo llegara siquiera.
-¿Dejamos la cita para mañana?- parecÃa algo desesperado pero la risa no atravesó mis labios. Me limité a reÃrme en mi fuero interno. Me gustaba ponerle nervioso.
-Ya veremos- volvà a colocarme las gafas de sol y subà la ventanilla mientras pisaba el acelerador- nos vemos mañana.
-¿CreÃa que habÃamos quedado?- objetó alzando una ceja.
Fruncà los labios.
-Lo siento Adam pero tengo que encargarme de un problemilla- contesté mientras deslizaba la vista hacia el Jeep del novio de mi gemela.
-¿Diuke?- preguntó algo tÃmido.
-Quién sino. A veces incluso me sorprendes- sonreà pero enseguida me serené. Mi objetivo salÃa del parking y no querÃa que Lauren desapareciera de casa antes de que yo llegara siquiera.
-¿Dejamos la cita para mañana?- parecÃa algo desesperado pero la risa no atravesó mis labios. Me limité a reÃrme en mi fuero interno. Me gustaba ponerle nervioso.
-Ya veremos- volvà a colocarme las gafas de sol y subà la ventanilla mientras pisaba el acelerador- nos vemos mañana.
Laura, nacida en Santiago de Compostela un lluvioso 10 de Febrero, de ascendencia italiana, mallorquina desde los tres años e intentando estudiar Medicina desde hace cinco.
Actualmente trabajando en "El Suero" una historia nueva sobre un sistema corrupto que miente, controla y abusa de una sociedad engañada.
Espero leer mas pronto!!!! Bueno no tan pronto porque me dejaste con la intriga en los otros relatos!!!!
ResponderEliminar¡Nos leemos!
bss
PD:Gracias por no decir nada.
Es genial! Que buen comienzo, ahora tengo ganas de mas! Have a nice day :)
ResponderEliminarMe gusto mucho (todas las historias que publicas me gustan mucho, de hecho), espero que pronto puedas dejarnos más capitulos.
ResponderEliminarPor cierto, he visto los personajes y me encantaron!!!
Me encanta!! Tiene buen futuro! Espero poder leer más capitulos ;)
ResponderEliminarSigue escribiendo y subiendo caps (de todas las historias, porque me encantan)
Girl
SIII! qiero máaaaas! Me encantó, mmm... ya me imagino qé será el rumor de Lauren con su noviecito, XD
ResponderEliminarBesoos
¡¡¡OYE LAU,QE YO TAMBIEN ESTOY EN ESTE PEQUEÑO PROYECTO!!!¡¡¡LYDIA,ALINA,Y YO,ESTAMOS EMPATADAS EN EL PRIMER PUESTO DE MAYORES FANS DE A DOS PASOS DEL INFIERNO!!!!
ResponderEliminarAJA VE!! LO DE EL PROYECTO VA VIENTO EN POPA!!
ResponderEliminarME ENCANTO EL CAPITULO DESDE QUE ME DIJISTE QUE TENIAS UNA HISTORIA NUEVA QUE PUBLICAR Y ME DISTES LAS PISTAS ME DEJASTE CON LA INTRIGA, ESPERO PRONTO NUEVOS CAPIS, PERO NO TE OLVIDES DE LAS OTRAS.
P.D: ME ENCANTA LA PORTADA
Creo que cambiarás el 1º capÃtulo cuando edites tu libro, eso creo, quizá me equivoque... :/ Te leo.
ResponderEliminarCarpe diem!