Capítulo 15 & 16- A Dos Pasos del Infierno

¡Lo prometido es deuda! Asi que como prometí aquí estan los dos siguientes capítulos de A Dos Pasos del Infierno, ya que el Club de Fans ha llegado ya a los 15 seguidores! Muchas felicidades a lo que los habeis conseguido y sin mas dilaciones os dejo con los capitulos.

P.D: no tengo mucho tiempo por eso no puedo subir los premios de Alina, felicidades Alina y prometo que los subire.
Y recordad que podeis seguirme en twitter: @walkingmemories o @auraazuul
¡Buen Karma!

Capítulo 15- A Dos Pasos del Infierno



-Venga, otra vez.- Dijo Sandro.- ¿Cuándo fue la primera vez que nos vimos?
Ambos estábamos sentados frente a la mesa del salón, cada uno con un papel y un bolígrafo. Habíamos decidido apuntar las cosas a modo de esquema con la intención de no pasar nada por alto.
-En Berlín, ni siquiera recuerdo que año era.-Contesté.
-Ya. La verdad es que yo tampoco. Bueno, cuéntame qué pasó.
Suspiré y empecé a hacer memoria mientras Sandro agarraba el boli y se disponía a escribir. Conocía los detalles por encima, pero eso no nos bastaba en aquel momento. Me tomé mi tiempo para reconstruir mentalmente toda la escena, cuando creí que ya la tenía me aclaré la garganta y comencé.
-Era de noche, iba caminando por las calles sin luz de la ciudad hacia mi casa después de una fiesta, bastante aburrida la verdad, llevaba un vestido largo y de fácil romper. Cuando estaba a un par de calles de mi casa te vi, estabas sentado sobre un balcón, con los pies colgando y las alas desplegadas. En cuanto identifiqué lo que eras sonreí para mí misma, ibas a ser una bonita forma de entretenerme.
<<Decidí que sería más divertido sorprenderte por detrás, por supuesto no tenía pensado matarte en el acto, si no la diversión se habría acabado muy deprisa. De modo que de forma sigilosa me acerqué al edificio por entre las sombras y me situé en un esquina, materialicé la espada. Iba a subir por la fachada cuando se me ocurrió una idea mejor; empecé a gritar y a pedir ayuda, y entonces vi tu sombra volando en mi dirección, espada en mano, picaste como un pececillo al pensar que yo era una muchacha en apuros.
<<Pero debiste detectar mi esencia, ya que fuiste tú quien me apuntó por la espalda, también supuse que debías estar aburrido ya que tampoco me atravesaste de lado a lado.
-Muy convincente, lo de la doncella en apuros.- Dijiste.
-¿Qué me ha delatado? ¿La espada? ¿Las alas?
-La falsedad.- En ese momento empecé a odiarte.
<<Me giré con la intención de darte con la espada en la cara, para tu suerte te moviste rápido y la esquivaste, la verdad es que me esperaba más habilidad con la espada, pero debo confesarte que en aquella época eras bastante lento.
<< Supongo que en realidad no necesitas que te relate como fue toda la pelea, pero ambos sabemos que yo era mucho superior, no me mires así, estuve a punto de darte en un par de ocasiones, de hecho creo que hasta te hice un corte, sí, recuerdo lo mucho que me costó quitar la mancha de sangre del vestido…
-Espera- me interrumpió Sandro- ¿recuerdas de qué color era la sangre?
Miré hacia arriba mordiéndome el labio inferior. Recordé lo mucho que tuve que frotar para quitar la mancha y como a medida que restregaba el jabón sobre la prenda el agua se teñía.
-Roja.- Dije, como si aquello no tuviese la menor importancia, cuando me di cuenta.- Oh, ¡ya entiendo!
-Exacto, la sangre de los ángeles no es roja, si no blanca, a no ser…
-Que esté contaminada.- Acabé yo.-Por tanto…
-Ya estábamos malditos la primera vez que nos vimos.
Asentí con la cabeza, no sabía como no me había dado cuenta mientras lavaba el vestido, ¿cómo podía haberlo pasado por alto? Alomejor sí lo noté y no le di importancia.
-Pero eso no tiene sentido.-Dije.
-Tiene que tenerlo- Hay algo que no recordamos, puede que esa no fuese la primera vez que nos viésemos.
-¿Y qué hacemos?
-De momento seguir recordando. ¿Dónde fue el siguiente encuentro?
-Mmmm… Creo que fue en el Cairo.
-¡Ah si! Ese lo recuerdo bien.
-Pues todo tuyo.
Sandro relató todo nuestro encuentro, con todos y cada uno de sus minúsculos detalles. Y la verdad es que aquella pelea había sido realmente aburrida, de hecho desconecté a la mitad del relato. Mi mente empezó a pensar en otras cosas, cosas estúpidas, cosas como el penoso día que hacía fuera, lo nerviosa que me ponía que toda la cas fuese del mismo color, lo bonito que tenía Sandro el pelo…
Me pegué un bofetón a mi misma y Sandro se calló. ¿Pero que me estaba pasando? ¿Habían sido mis pensamientos o los de Sandro los que me habían estado rondando la cabeza? La verdad es que ya no los distinguía. Pero el ángel había estado ocupado relatando la historia, así que tenía que haber sido cosa mía, sí, esos pensamientos eran míos sin duda alguna. Pero, ¿qué demonios me estaba pasando?
-Carina, ¿estás bien?- Sandro me miraba con los ojos como platos.
-¿Yo? ¡Pues claro!-Me encogí de hombros, como si fuera algo evidente.-¿Por qué no iba a estarlo?
-No lo sé. Te acabas de pegar un bofetón a ti misma, no es un comportamiento muy…normal.
Mierda, era cierto. No sabía que me estaba pasando, sabía perfectamente que me había pegado a mi misma, solo había pasado hacía unos segundos, y después había negado ese extraño comportamiento, nada tenía sentido y estaba empezando a marearme, quizá por el golpe.
-Fíjate hasta tienes la mejilla roja.-Sandro se levantó, rodeó la mesa y se sentó en la silla que estaba junto a la mía. Examinó mi rostro detenidamente desde el lado en el que me había golpeado y puso su mano sobre mi mejilla roja.
El contacto hizo que algo se activara en mí, me extrañé, no era la primera vez que me tocaba, aunque nunca lo había hecho en una situación como aquella, lo físico no cambiaba. El ángel frunció el ceño, empezó a acariciar mi mejilla con el dedo pulgar, suavemente. Entrecerró los ojos, como si sus actos no se correspondiesen con sus pensamientos.
Mi respiración empezó a acelerarse, las manos me temblaban y las alas me pesaban. Toda la habitación empezó a dar vueltas, Sandro colocó su otra mano en mi mejilla, decía algo pero no podía oírle, solo podía ver sus labios moverse, su figura era la única que permanecía quieta en la habitación. Alcé una mano, o eso creí, ya que no la vi aparecer en mi campo de visión.
Sandro volvió a decir algo, pero tampoco  lo oí. El ángel quitó las manos de mi rostro y apretó los ojos mientras se presionaba ambas sienes.
Eso fue lo último que vi antes de desmayarme.




Capítulo 16- A Dos Pasos del Infierno

 -¿Carina?...-La cabeza me dolía.-¡Carina!
Abrí los ojos, Neutro estaba sentado en el borde del sofá, sin tocarme, y Sandro estaba de rodillas al otro lado de la mesa de café.
-¿Qué ha pasado?-Murmuré, llevándome la mano a la cabeza. Sandro tenía un aspecto horrible, estaba más pálido que de costumbre y sus ojos no reflejaban ironía, ni siquiera vida.
-Te has desmayado.-Afirmó Neutro, parecía muy molesto, pero, ¿por qué?
-¿Y por qué Sandro no?-Giré el rostro hacia el ángel, el aludido alzó la vista y me miró con ojos suplicantes, ¿qué estaba pasando?
-¡Pues no lo se!-Neutro se puso de pie y alzó los brazos.-¡El muy imbécil ha contrarrestado de alguna manera los efectos de la maldición y ahora se está quedando sin fuerzas!
-¿Qué?-Miré a Sandro de nuevo con los ojos abiertos como platos.-¿Sabías que podías contrarrestarlos?
-Sí.
-¿Y sabías que podías perder fuerzas?
-Sí.
-Os juro que entre los dos vais a volverme loco.-Neutro caminó hacia la puerta y antes de salir de la sala exclamo:-¡Vais a volverme loco!
Cuando Neutro se fue todo se quedó en silencio y Sandro bajó la cabeza para mirar a la alfombra como si ésta fuera un animalito a punto de morir. Me levanté con cuidado de no caerme, siempre tardaba un poco en reponerme de los desmayos.
Rodeé la mesita de café y me senté junto al ángel, me puse a pensar que podía decir. No sabía que estaba pasando, sí sabía por qué Neutro estaba tan enfadado, pero no sabía que es lo que le estaba pasando a Sandro, porque estaba claro que no tenía esa expresión solo por haber perdido fuerzas.
-Está muerta, Carina.-Dijo.
-¿Muerta?-Pregunté, su afirmación me había desconcertado.-¿Quién, Sandro?
-Daphne.
¿Daphne? Nunca me había hablado de ella, ¿su madre? No, él ya sabía de sobras que su madre había fallecido hacía años. ¿Entonces quién? Justo entonces se me ocurrió la idea.
-¿La chica humana?
Sandro asintió, y tal como lo hizo una lágrima huyó de su rostro. Cerró los ojos con fuerza, pero aún así las lágrimas no se detuvieron, continuaron rozando sus mejillas y empapando la alfombra.
La imagen me mató por dentro, sentí como una parte de mi esencia se moría, se partía en trozos imposibles de volver a pegar. No sabía si era su tristeza la que sentía, pero el caso es que la sentía, notaba como esa sensación me desgarraba por dentro.
Miré a Sandro y me aclaré la garganta.
-¿C…Cómo lo sabes?
El ángel tardó varios segundos en contestar.
-Cuando te vi desmayarte lo recordé. La imagen cruzó mi mente, como una instantánea-la voz se le quebró-recordé como su cuerpo caía entre mis brazos, sin vida. Después de todo murió.
-Sandro, debes entender que los humanos…
-¡NO!-Sandro se puso en pie.-¡No lo entiendo! ¡Y no quiero entenderlo! ¡No puede estar muerta! ¡Ella…! Ella…
Me puse en pie también y coloqué mi dedo índice bajo su barbilla para hacerle alzar la cabeza y mirarme.
-¿Ella qué, Sandro?
-Ella… ella era mi vida.-Entonces se derrumbó, escuché como los sollozos salían de su garganta y veía como las lágrimas salían de sus ojos como ríos. No aguantaba más, abracé a Sandro y dejé que las lágrimas me abandonaran también a mí.
-Carina…-Susurró entre sollozos a mi hombro.
-Shh…-Murmuré.-No digas nada. Todo saldrá bien, ¿de acuerdo? Estamos juntos en esto.

CONVERSATION

9 comentarios:

  1. me- me has dejado... no se ha sido como... esque.. en serio... ah!! no se que decir de estos dos capitulos han sido tannnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnnn maravillosos que me han dejado sin palabras y sabes que tonta (cariñosamente) he llorado con ellos!!!! ha sido la escena mas bonita que he leido!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!! por favooooor sube mas!!!

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  2. Por fin por fin POR FIIIIIIN!!! :D

    Simplemente... Me has dejado sin palabras. Uffffff esto cada vez se pone mas interesante! Espero poder leer el próximo capitulo pronto ^^ y suerte con lo del club de fans!

    Un besoo

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  3. estoy a punto de llorar, me dejaste con una sensación, es increible Lau, me ha dejado... no se que decir.
    bss

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  4. Hola!!
    Sé que aun no te comentado...ó al menos no tengo recuerdo de ello,...y quería decirte que hoy me he leído ¡Los 16 capítulos! me has enganchado =) llevo dos días diciéndome empieza a leer empieza y hoy que me aburria he empezado ¡Y me encanta!, espero el prox. cap. y también de secretos a gritos (L)
    Saludos^^

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  5. por fin a sido maravilloso, me encanta, me has dejado puff no se que decir, casi se me saltan las lágrimas

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  6. woooow simplemente me encanto!!!
    me encanta el rumbo q toma la historia!!!
    porfa visiten mi blog es nuevo y me gustaria mucho q lo recomendaran tambien
    http://lagrimas-de-sangre-danhy.blogspot.com/
    saludos!!!

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  7. ahhhhhh!! dios y yo que pense que se me haria mas largo con dos capi, se me hizo mas corto!!
    pero los ame y me obscecione mas!
    oh! mi sandro no importa esa fea humana aqui toy yo!!...y bueno carina.

    "lo bonito que tenía Sandro el pelo…" adore esa parte xD

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  8. Hola Lau! Tenía tiempo sin dejarte un comentario...
    Pero ¿¡Por qué!? a mí también me dejaste con un nudo en la garganta, pobre Sandro, ¡no es justo! Pero que lindo, Carina consolandolo...
    En fin, ojala y pronto puedas dejarnos el proximo capítulo =D
    Cuidate mucho.

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  9. me encnato el cap!!! genial!! fue una pasada!! pobre sandrooooooooooooooooooo un beso y espero k publikes pronto!!

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